La Provincia de Chubut está situada en pleno corazón de la Patagonia Argentina. Sus hermosos y muy variados paisajes le dan un atractivo sin igual para el turismo, en especial el turismo paleontológico y el astroturismo. Sin embargo, es el enoturismo el gran impulsor de que en la actualidad haya numerosos pequeños emprendimientos vitivinícolas que exploran y aprovechan la gran diversidad de terroirs.
En Chubut, más precisamente en un campo de la localidad de Trelew fueron hallados restos de una de las criaturas de mayor tamaño, hasta ahora, que hayan existido sobre la superficie de la Tierra: del género Titanosaurus, un dinosaurio hervíboro que vivió hace más de 60 millones de años. El ejemplar encontrado tiene una longitud de cabeza a cola de aproximadamente 40 metros, una altura de 20 metros y un peso cercano a las 70 toneladas. Si uno visita el Museo Paleontológico Egidio Feruglio, en la Ciudad de Trelew, puede observar los esqueletos de estos gigantescos animales y comprender por qué se denomina a la zona como de Vinos y Dinosaurios.
En la vitivinicultura argentina, desde hace algunos años, se ha iniciado la búsqueda y desarrollo de nuevas áreas vitivinícolas que permitan por un lado ampliar la oferta de vinos de características distintivas que son la expresión de su origen (vinos de terroir y blend de terroirs) y por el otro ir explorando nuevos enclaves que permitan compensar los efectos del cambio climático.
En el contexto del cambio climático, se debe tener presente que Mendoza y otras provincias del Oeste del país vienen atravesando por duodécimo año consecutivo una crisis hídrica preocupante, causada por la falta de precipitaciones níveas en alta montaña. Además, las estimaciones basadas en el seguimiento de los datos relevados pronostican sequías prolongadas y ondas de calor en buena parte de las regiones vitícolas tradicionales, situadas al Oeste del país en las provincias andinas de Jujuy, Salta, La Rioja, Catamarca, San Juan, Mendoza y Río Negro.
Esta búsqueda de nuevos enclaves para el cultivo de la vid, ha expandido los límites de la vitivinicultura argentina, tanto en latitud como en altitud y longitud.
La superficie total con vid, en el año 2020 según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura, es de 214.798 hectáreas. Frente a esto la superficie de Chubut con 87 hectáreas es pequeña, pero es de destacar que hay muchos proyectos e iniciativas más o menos recientes que buscan obtener vinos de calidad y características particulares por el impacto de los diferentes terroirs. Es decir, más que cantidad aporta diversidad a la oferta de vinos del país.
Chubut es por el momento la provincia más austral con vitivinicultura en Argentina. Se extiende desde el paralelo 42°S al paralelo 46°S y desde la Cordillera de los Andes al Oeste hasta el Océano Atlántico al Este.
Si bien es muy nueva en la actividad vitivinícola ya está reconocida y protegida la Indicación Geográfica Chubut. De oeste a este hay tres regiones netamente definidas:
- La cordillerana: donde se encuentra la Comarca Andina que es una unidad geográfica que comprende viñedos del sur de la provincia de Río Negro y del norte de Chubut. Aquí podemos mencionar las localidades El Hoyo, Lago Puelo, Epuyén y El Maitén.
Es de clima subcontinental y los suelos predominantes son del tipo alofanos o de origen volcánico, muy heterogéneos, ligeramente ácidos con pH 6,8 a 6,9 lo que confiere gran estabilidad en el color de los vinos tintos. La altura varía entre 250 y 670 msnm. La precipitación media anual es de 800 mm. La principal limitante para el desarrollo de la vid son los vientos predominantes del Oeste y las heladas tempranas y sobre todo las tardías que son las más dañinas.
En esta parte de la Comarca Andina correspondiente a Chubut hay 5 bodegas en total y más de 40 pequeños productores vitícolas. Se destaca la localidad de El Hoyo donde Bernardo Weinert fue el pionero que implantó las primeras plantas de vid en 1994 y construyó la bodega en 1998, hoy llamada Patagonian Wines y en manos de otro propietario.
A partir de 2012 comienzan a desarrollarse otros polos vitivinícolas. Más hacia el Sur recostado en la cordillera está el Valle 16 de Octubre, en la localidad de Trevelin que posee tres bodegas pequeñas, de poco volumen, que han reconocido y protegido la Indicación Geográfica Trevelin.
En la región cordillerana los viñedos se fueron plantando de preferencia en los faldeos de pequeños valles. Se producen vinos de muy buena acidez natural, estables de color y gran complejidad por la gran amplitud térmica diaria, los veranos son frescos y las noches frías. También hay viñedos de secano en los que la vid se desarrolla muy bien sin síntomas de estrés. En estos viñedos se hace una mínima intervención humana. Otra característica de esta región, a diferencia de otras, son las añadas muy marcadas.
- La meseta central patagónica: donde se hace viticultura en las localidades de Paso del Sapo y Gualfaina al Centro-norte y Noroeste respectivamente de la provincia de Chubut. Cabe señalar que las precipitaciones van disminuyendo de Oeste a Este, los suelos son de tipo aluvional y los viñedos se encuentran entre bardas a orillas del Río Chubut. Aquí el factor adverso son los vientos predominantes del Oeste, que a veces soplan extremadamente fuerte con ráfagas que superan los 120 km por hora.
Es interesante señalar que en estas dos localidades se está promoviendo y desarrollando el enoturismo asociado con el astroturismo para admirar los hermosos cielos nocturnos de Gualfaina especialmente y también con el turismo paleontológico.
Además, en la meseta patagónica pero más al Sur, a 45° de latitud Sur, en el departamento Sarmiento, a 120 km del Océano Atlántico, a 200km de la Cordillera de los Andes y a 50 km del límite con la provincia de Santa Cruz se ubica otro enclave vitivinícola con la bodega Otronia, la más austral del país y la más grande de la provincia.
Es la región más fría del país para viticultura, con temperaturas de hasta 20°C bajo cero en invierno. Las heladas se mantienen prácticamente durante todo el año, incluso durante el ciclo vegetativo, etapa donde las amplitudes térmicas son muy extremas. Las temperaturas promedio a lo largo del año son entre 3°C y 4°C inferiores a las que se registran por ejemplo en el Valle del Uco, en Mendoza. Este es un factor que caracteriza a la región y favorece grandemente la calidad de los vinos: granintensidad aromática y muy buena acidez que confiere notable frescura.
- La costa del océano Atlántico: En la zona costera de esta provincia, desde el paralelo 42°S al 46°S hay numerosos pequeños viñedos que producen vinos con influencia oceánica. Se pueden mencionar las localidades costeras de Puerto Madryn, Trelew, Rawson, Gaiman, Bahía Bustamante y un polo vitivinícola en formación en Comodoro Rivadavia sobre los 46° de latitud Sur. La altitud mínima está en Bahía Bustamante donde los viñedos se encuentran a sólo 20 msnm. Los suelos son un poco más alcalinos con valores de pH por encima de 7 y calcáreos. La precipitación media es de unos 210 mm.
Si bien en Chubut el cultivo de la vid es relativamente nuevo, la provincia tiene un gran potencial, al incluir en su vasto territorio muy diversos terroirs que ya producen o pueden producir vinos de características distintivas. Con gran pasión se ha ido generando una actividad muy promisoria para el enoturismo al sumar el vino a los hermosos paisajes.